miércoles, febrero 26, 2014

este jueves...

nos vamos en tren...




Es hora!
Las sonrisas se preparan como único equipaje.
Los boletos de papel picado y de variados colores, bailotean en sus manos.
Vamos! Vamos! -gritan  voces impacientes- y entre empujoncitos amistosos van trepando a los vagones.
- Afinemos nuestras voces, porque este tren necesita un combustible especial...


con el chucu-chucu. chucu
con el chucu- chucu-chá...

- A dónde nos llevará este tren? -pregunta algún curioso.
- Lejos, muy lejos, a donde la imaginación se le antoje.

Recorreremos praderas, seremos ligeros sobre las vías, lanzaremos un humo celeste para que se confunda con el cielo. Haremos de este viaje un transitar de alegría... porque amigos, en este tren, solo se viaja durante la infancia, con repique de zapatitos contra el suelo y los brazos cual lazos extendidos, de hombro a hombro...

- Vamos, de apuro, subamos a los vagones de la amistad y el juego!
Y yo... yo seré la locomotora, ruidosa y divertida que guiará este paseo.


con el chucu-chucu. chucu
con el chucu- chucu-chá...


 

Dedicado a todos los niños con los que tuve el gusto de compartir como su maestra en educación inicial.


Más trenes siguen en viaje en el universo de Esperanzapia

martes, febrero 25, 2014

contando las semanas en 52 palabras...


De la mano de Sindel




novena palabra

palabra 9 de 52

DUDA

...si he de elegir...¿elijo no elegir?...

He perdido la verdad en un tumulto de ideas: confusas, encimadas, rebeldes, adiestradas, convexas, obtusas, profundas y superficiales...
Mi corazón desacompasado pide en un grito de auxilio, una clave, una señal que desate tanto nudo comprimido.
No es fácil, ni aquí ni allá, ni en el borde ni en el centro. No encuentro el punto medio.
Entonces, comienza el asedio. Frases mal compuestas, puertas semiabiertas, puentes sin destino, manos que no llegan, ojos que no ven.
No hay base, no hay sostén, más solo una cuerda que ahorca con el filo de la incertidumbre...

-Qué debo hacer?

Dos orillas antepuestas, dos razones poderosas que sobre los platillos se posan de mi balanza inquieta.
Si no encuentro el equilibrio ni la postura de alivio que por fin me nivele, tendré que matar mi duda con un dolor que me hiere...
Decido no decidir y llevarme mi duda a cuestas...



.
hice bien?
hice mal?
qué hubiera pasado allí?
qué, más allá?
dudas... solo dudas...

jueves, febrero 20, 2014

este jueves...

vida insípida...

Desde pequeña, Albina gustaba de husmear en la cocina llevada por una atracción especial. Bien se podía entender, ya que su abuela, una doña rellena de sabiduría culinaria, vivía gran parte de sus días entre cacerolas que emanaban vapores y sabores irresistibles. Eso era algo que la embelesaba.

La madre de Albina, fiel aprendiz, también se lucía con su despliegue de sabores en platos  un tanto más refinados  pero realizados con igual esmero y cariño, sobre todo para agasajar a los suyos a la hora de la cena.

A la tarde, cuando su padre y su abuelo regresaban a casa, afinaban su olfato y como  sabuesos detrás de su presa, seguían la estela invisible de aquellos aromas exquisitos que provenían de la cocina. Encendidos por un apetito incontenible, corrían a prodigarles el abrazo cálido y el beso efusivo a esas mujeres que tan ricamente los seducían.  Era evidente que el amor palpitaba más allá de sus corazones, y esa vivencia, ante los ojos de la niña, dejó patentada la certeza de que  amor y  buena comida se estrechaban en íntima alianza.

Los años fueron pasando, y Albina, ya mujer, se había criado entre salsas, hierbas aromáticas, mágicos glaseados y todo un recetario que bien se había encargado en albergar en un cuadernillo que cuidaba como al más preciado tesoro. Sin embargo, sus intentos culinarios nunca habían tenido mayor éxito. Solo bastaba verles la expresión a sus amigos, las veces en que los había invitado a probar alguna de sus preparaciones, para darse cuenta que tristemente había fracasado en su propósito. No entendía bien el motivo, siempre fue cuidadosa y obediente al seguir el paso a paso, atenta a las medidas de cada ingrediente, pero extrañamente, todo cuanto preparaba sabía desabrido, insulso, totalmente insípido. Fue así como renunció indefectiblemente a la labor gastronómica. 
Para entonces  su propia comida no era otra que las que compraba al paso o en viandas pre-cocinadas, listas para ser horneadas en cinco minutos.

Aquella decepción por no poder seguir el camino de sus antecesoras, la llevó a tener una vida a la que no le hallaba el rumbo. Comenzó cursos diversos, los que al tiempo fue abandonando por no encontrarles el gusto. Sus amores, no fueron más que encuentros fugaces con chicos que luego de dos o tres citas, desaparecían sin dedicarle explicación alguna. 
De a poco se fue encerrando en sí misma, despreocupándose de su aspecto,  de su modo de vestir, viviendo en una desidia que la absorbía día tras día. Todo carecía de interés y la llevaba a concluir en cuán desabrida podría ser la vida e incluso ella misma: insípida hasta la médula.

Pero un día, a través de su ventana, se escabulleron las notas de un violín. Suaves y melódicas, recorrieron los rincones, se esparcieron en el aire para instalarse finalmente en lo más profundo de su alma. Un deseo incontenible la empujó a la cocina y casi poseída por un encanto inexplicable fue tomando al azar los pocos ingredientes que fue encontrando. Picó y lloró con la cebolla, se sonrojó con la blanda pulpa del tomate, sonrió con los dientes de un ajo, y fue volcando todo su entusiasmo en una olla de la que empezó a fluir un vapor cálido y aromático.
Poco faltó, para que ese estado de abstracción culinaria se viera interrumpido por el sonido del timbre. Sorprendida, abrió la puerta. Y allí estaba su vecino, sosteniendo en su mano su violín y algo sonrojado, le propuso tímidamente:

- Te ofrezco una sonata para violín a cambio de un plato de ese sabroso arroz a la boloñesa.

Desde entonces, ambos sellaron el pacto.




para seguir saboreando letras insípidas
pasar por soliluna

martes, febrero 18, 2014

contando las semanas en 52 palabras...

Acompañando a Sindel

octava palabra

palabra 8 de 52

DESEO

Mi deseo se escurre
por la curva sinuosa
de las tentaciones.
Se aligera
o se aletarga
en el tiempo...
se hace brisa,
rosa,
aire,
se hace agua.
Se derrama
en diversas
sensaciones.

Mi deseo es fortuito
y es profundo,
tiene la voz del grito
y el silencio
de un secreto,
y se detiene
en el filo del abismo
cuando intenta
convertirse
en algo cierto.

Mi deseo
morirá entre tus labios,
cuando alcance
a moldear sus antojos
convirtiéndose
en el cuenco
de tu boca,
en el dulce
de un prohibido
fruto rojo...

miércoles, febrero 12, 2014

y vamos por un jueves de aMoR





dicen que "el tiempo, solo es la tardanza de lo que está por venir"...

¿Qué intenciones guarda el tiempo?

...calendarios, anaqueles, relojes presurosos, desvanes, mediodía, un cofre con esquirlas de recuerdos, el último capítulo de una novela, el té de media tarde, agenda cotidiana, reserva de un pasaje, pasadizo hacia el olvido, proyecto aplazado, el teléfono y su urgencia, inesperado llamado, confesión a media noche, luna en fase nueva, otoño recién llegado, prisa y mesura, lluvia repentina, sueño a develar, mañana bien temprano, desayuno con tostadas, baldosas grises, el ómnibus que no llega
ven que te extraño...

...la compra del día, visión hacia el futuro, presentimiento, predicción, el ermitaño, sol en plena cara, la ropa recién colgada, cuentas a pagar, el sueldo a fin de mes, giro de tuerca, cambio de planes, migraña persistente, recital con entradas agotadas, cansancio, vitaminas, 
aún te estoy esperando...

...extraña algarabía, feliz cumpleaños, costumbre, apatía, borrón y cuenta nueva, bienvenida, alegría, el camino se hace largo, cerveza compartida, reunión, ay! llego tarde!, intuición, encuentro, punto acordado, momento preciso, invierno, hace frío, tibieza a fuego lento, paraguas abierto, consuelo, qué hora es? 
te sigo soñando...


...esperanza y espera, qué vuelva la primavera!, qué lindo verte!, la cama desecha, falta de inspiración, fecha de vencimiento, 
y tu que no llegas...

...mensaje de texto, preguntas sin respuestas, confusión, habladurías, mail enviado, encargo, encomienda, se viene el verano, rompe la ola en la orilla, tengo el cabello más largo, confianza, augurio, llanto, cuento y descuento, ofertas... dejaré la puerta abierta... 
ahí viene llegando...

¿Qué intenciónes guarda el tiempo?
...el tiempo se nos pasa volando...


y yo me pasé una vida entera AMOR... esperando, esperándote, esperándonos...

amores y enamorados en el Balcón de Casss

regalito que vino volando desde el balcón de mi vecina Casss 
Gracias!!!

 

lunes, febrero 10, 2014

contando las semanas en 52 palabras...

para no dudar de que las semanas pasan rápido

séptima palabra

palabra 7 de 52







Sindel propone...
la palabra:
PALABRA


Que se abra la palabra
con sus ojos de letras,
y una lengua madejada
de razones, preguntas y respuestas.
Que se adhiera a las voces
o se esconda en los silencios,
recitando sus dolores,
escribiéndose en versos...
Abrapalabra!!!
A veces me quedo sin ella
pendiendo de una nube sin lluvias
o una noche sin estrellas.
Cuando nace sin aviso,
no siempre es la adecuada
y se escurre en osadía
-impertinente y deslenguada-
Pero hoy,
que mi corazón canta...
la palabra se alborota
y nace noble,
como una melodía en gotas...
de miel,
de colores,
de vuelos,
de esencia de realidad
(de la buena)
y se hace cálida y amiga
proclamando hermandad...


que no nos queden por decir
esas tantas palabras
que sabemos necesarias...


 Todas y cada una de las palabras AQUÍ

miércoles, febrero 05, 2014

jueves...


en prisión!!!



Allá marchó.  Con la cabeza erguida a pesar de sus culpas.
Su idilio con la muerte había terminado. 
Plasmado en su retina se llevó el rostro de su víctima. Una, una sola repetida infinidad de veces, ya no recordaba cuántas pero para él siempre fue la misma. 
Había volcado la inquieta insatisfacción de una vida apocada por la baja autoestima, el autoritarismo maternal, el vacío dejado por un padre que no quiso saber ni su nombre, y la indiferencia de esa mujer que en cada esquina se le reía de su pobre vida, de su apariencia insignificante, rechazándolo como si fuera un bicho asqueroso. 
Una y otra vez, exterminaba esa inmortal visión que tanto le dolía. 



Quién era capaz de juzgarlo? 
En su cabeza, la sensatez era su propia locura. 
Su violencia era su paz. 
Su fuerza, la debilidad de esa mujer -o mujeres, ¡qué importaba ya!... era un déja vu el que giraba dentro de su mente.

Ahora, en prisión, escribía en las paredes con un sus propias uñas el nombre que le puso a tantas muertes, a tantas mujeres que inocentes sintieron el filo del cuchillo que las desangró sin más.... 
Macarena, Macarena, Macarena, Macarena, Macarena....






The Daily Planet´s Bloggers, es donde muchos más prisioneros
tienen historias que compartir



Gracias a los chicos del Daily!!!, ya me tienen fichada
por mis dudosos antecedentes!

lunes, febrero 03, 2014

contando las semanas en 52 palabras



propuesta de Sindel
la sexta palabra 

palabra 6 de 52


PAZ






Dentro, muy dentro,
tibias, muy tibias...
las alas que alientan el espíritu
clamando su necesidad.
Vuelo fecundo
entre nubes que se engarzan
en un cielo
de terciopelo,
cuando todo está en calma.
Allí, la luz y el brillo,
allí el aire cual alabanza
ascendiendo
desde lo interno
como una caricia mansa.
Tal vez el sonido de la lluvia,
quizá, el aroma que viene del mar,
o las páginas de un libro
o las ganas de cantar,
vengan a bordar este río
de azul y profunda paz...

pinceladas...

pinceladas...
y te recorro con tinta azul, cielo nocturno de mis profundas necesidades

sobrevuelo...