Este no era un día
como todos. Melissa Berg, periodista e informativista del canal 14, en la
edición nocturna de “La noticia viene
volando”, llegó sobre la hora, con el rostro demudado y la mirada perdida. Se hallaba muy lejos de su elegancia habitual, cosa que
llamó la atención en el piso.
Rápidamente, sus asistentes corrieron a
maquillarla, peinarla, colocarle el micrófono y los implementos necesarios para
comenzar a transmitir en vivo y en directo. También recibió las indicaciones pertinentes,
previas al inicio de la transmisión, mas ella, parecía perdida en la
lontananza, distante a todo cuanto acontecía a su alrededor. Como
autómata, se acomodó en su lugar y con la mirada enclavada en la nada misma,
esbozó una forzada sonrisa para empezar con la presentación habitual.
No parecía
concentrada en lo que decía, incluso cometió furcios, algo que generalmente no
le ocurría y de lo que solía burlarse cuando le acontecía a cualquier
comunicador.
Llegado el primer
corte, que daba paso a los auspiciantes del informativo, pidió agua. Sus manos temblaban. Alguien se acercó a preguntarle si sentía bien en tanto le
alcanzaba un informe de último momento. Melissa asintió con la cabeza,
dubitativa, en tanto leía por encima el papel que le era entregado. Su rostro
se transformó, una palidez brutal se trepó a su rostro, y con un gesto mezcla de
pavor y seguridad, se reacomodó en su sitio, irguiendo su mentón y lanzando un
suspiro que parecía contener todo el aire que había aspirado en su vida. Fue en
ese preciso instante, que le anunciaron que estaba en el aire nuevamente.
- - Retomamos
la información –dijo con voz enfática- con una noticia de último momento. Fue
encontrado en su domicilio el cuerpo sin vida de un hombre de 53 años,
empresario de renombre, aparentemente víctima de un asesinato. La policía
indaga el hecho, siguiendo pistas firmes. Se sospecha que se trata de un crimen
pasional… -justo allí, en esas dos últimas palabras, la voz de Melissa pareció
romperse en pedazos y con sus ojos fijos a la cámara, declaró: -Sin embargo,
“La noticia viene volando”, tiene la primicia del caso: - La culpable soy yo...
¡Toma ta! ¿Era verdad o todo vale por la audiencia?, jejejeje
ResponderEliminarEs el segundo relato, de este jueves, que leo que merece ser expandido.
ResponderEliminarAdemás, logras manipular a los lectores. Presentas a una periodista, perdiendo su elegancia habitual, logras preocupar por ella. Y la imagen que presentas, acentúa eso.
Para luego revelar que fue ella la responsable del asesinato. Y acá es donde podría expandirse. ¿Fue por defensa propia? Da la impresión de que no fue premeditado. ¿O lo fue? Y todo su nerviosismo es una puesta en escena, para conseguir atenuantes.
Me inclino por la primera teoría.
Que buena historia.
Enhorabuena ¡ Tu relato engancha de principio a fin ! Nos has ido llevando con decisión a un desenlace que deja la puerta abierta a un segundo relato....A mí me encantaría !!
ResponderEliminarGracias por tu cariño hacia mí, amiga.
Gracias por participar...¡ Besos maravillosa pintora !
En vivo y en directo, menuda noticia subirían las audiencias hasta el cielo. ¿Se vio la detención en directo? Un abrazo
ResponderEliminar!Wow!Verdaderamente de ultima noticia. Impactante final.
ResponderEliminarLograstes transportarme hasta el set donde la estaban maquillando. !Ay! pobre chica.
Estoy de acuerdo con Demiurgo, merece una continuación.
JA JA ¡me sorprendiste Tracy!!!!!!!
ResponderEliminarImpactante y buena historia. Con que facilidad te pones en el papel del periodista.. y yo como lectora lo estoy disfrutando. Bravo Gaby tienes mucho talento, las fotos una pasada.
ResponderEliminarBesos y feliz fin de semana
Isa
Esos sí que es dar la primicia! jejej...muy buen reato.
ResponderEliminar=)
Un relato magnifico y sorprendente final. Me ha encantado amiga G A B Y* Muchos besos.
ResponderEliminar...la vida te da sorpresas.... y acá nos la da la periodista y de tu mana. Nos has manipualdo a tu antojo, como buen escritora y ahí terminamos con la boca abiertade sorpresa!!!!
ResponderEliminarbien hecho,para eso leemos entre otras cosas, para que los finales nos dejen descolocados con ganas de saber más.
besos jueverísimos
Impresionante y espectacular Gaby, nunca hubiese imaginado el final. Enhorabuena amiga. Un fuerte abrazo y buen fin de semana.
ResponderEliminar@PepeLasala
¡pajarito! se autoinculpó, ¡qué final inesperado!
ResponderEliminarme gustó
saludos
¡Qué momento! Como bien dice el nombre del informativo "La noticia viene volado" Melissa dió la primicia. No esperaba ese final.
ResponderEliminarMe gustó mucho tu relato, merece una continuación!!!
Besote! Tu hijulina ☺
Hola Gaby*!!
ResponderEliminarHace tiempo vi una película, española creo, donde la conductora se inculpaba en cámara de un delito (no recuerdo si también era un asesinato u otro tipo de delito).
Tu relato es genial, como siempre... Sabés jugar con las palabras, creando climas que llevan al lector a sentirse parte de esa historia... Y con un final fantástico.
Felicitaciones!!!
Besote grande.
RoB
Durante todo el relato imaginé que era víctima de algo malo, que algo le había sucedido a ella, sin embargo al final me sorprendiste dando el golpe de que sus nervios se debían a todo lo contrario, algo muy grave e imperdonable que había cometido.
ResponderEliminarExcelente relato Gaby! Mantiene en vilo hasta el final.
Un beso enorme.
Genial relato y Genial forma de contarlo. Algo intuyes, algo imaginas, pero el suspense y la curiosidad no te dejan de la mano. ¡Perfecto!.
ResponderEliminarBesos
Sin duda tuvo que dar la noticia que puede ser la pesadilla de todo periodista, aquella en la que el o la protagonista es él o ella. También me atrevo a pensar que la protagonista llegó a lo más alto de su ego: ser la protagonista de su informativo. Bueno, esto ya es producto de mi imaginación, pero el relato está muy bien escrito. Nos diriges a un final totalmente cerrado.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo
Nos llevas letra a letra hasta ese final que da giro a todo el relato. Un relato que engancha y atrapa, felicidades Gaby.
ResponderEliminarBesos.
Madre mía, que final. Imaginaba que podía haber sido ella, pero no que el relato acabara de este modo. Me ha impactado muy agradablemente, amiga.
ResponderEliminarBesos.
Como Juan Carlos, también he pensado que toda su inquiietud y desasosiego era porque ella había sido la autora del crimen pasional. A partir de ahí, impacta que se autoinculpe del asesinato siguiendo los dictados de su vocación periodística. La noticia incluso por delante de su propia persona. Tal vez nunca la hubieran descubierto, pero la primicia periodistica le bulle en la sangre y tiene que darla.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.